Un robot realizado por jóvenes de Quijano esteriliza el hospital
Fue desarrollado por estudiantes, tiene eficacia comprobada en espacios COVID.
Fue desarrollado por estudiantes, tiene eficacia comprobada en espacios COVID.
El robot UVC ya esteriliza las salas del hospital Francisco Herrera, de Campo Quijano, utilizadas por pacientes con COVID-19 con una alta eficacia comprobada, de poder eliminar virus, bacterias y microorganismos.
El diseño fue desarrollado por alumnos pertenecientes al taller de máquinas CNC (control numérico computarizado) de la escuela técnica 3.106 del Portal de los Andes.
El robot es controlado con una aplicación sencilla desarrollada también por los autores del proyecto, que se basa en la tecnología japonesa, aunque convertida al desarrollo doméstico sin quitar eficacia al objetivo final, que no es otro que combatir la pandemia provocada por el coronavirus.
Luciano Arjona, con 21 años, egresado de la técnica, junto a Roberto Junco, de 18 años, que cursa el último año en el mismo colegio, y su profesor Carlos Alberto Ríos durante tres meses analizaron y diagramaron las posibilidad de la creación de este robot (aún no tiene nombre).
El artilugio desinfecta diversos espacios de manera remota, ya que el mismo es comandado por medio de cualquier tipo de celular, y por medio de una cámara con estabilizador, sólo una persona puede controlarlo, con lo que se logra que el controlador no se exponga al virus en ambientes de riesgo.
Sencilla y eficiente
“A diferencia de los demás desarrollos tecnológicos que se observan en otros lugares, nuestro robot está realizado con componentes que se pueden encontrar en cualquier lugar, y de un costo muy reducido, no por ello lo hace menos eficaz”, dijo el profesor Ríos.
El director de la técnica 3.106, Rafael Sángari, una vez que tuvo la propuesta en sus manos salió a buscar los recursos y la factibilidad de desarrollar en el taller de la escuela este ambicioso proyecto tecnológico. “Hablamos con el director del proyecto y él se encargó de buscar los insumos para el trabajo. Incluso conseguimos el asesoramiento del ingeniero Martínez, experto en electromedicina. Con material reutilizado de nuestros talleres y financiamiento de un lado y del otro, entre ellos el acercado por el diputado Lino Yonar, lograron confeccionar este robot”, contó.
El UVC tiene tubos de onda corta de mercurio, algo así como una frecuencia ultravioleta más alta; una base de caños estructurales y ruedas recicladas de una máquina de cortar césped. Su eficacia demostrada llegó a tener estos parámetros de esterilización: en una habitación de 3 por 3 metros, el robot necesita de 5 a 15 minutos de trabajo y en una habitación de 6 por 6, de 15 a 30 minutos.
“La efectividad de los tubos está demostrada. Irradian de forma ondulada y el pentágonos del diseño del equipo asegura que la esterilización llegue a cada rincón sin dejar puntos ciegos”, agregó.
En estos días, el robot UVC fue utilizado en las habitaciones donde los pacientes COVID-19 permanecen en el hospital Herrera de Quijano.
También fue ocupado en otras áreas del nosocomio.
Este es un gran avance que permitirá a hospitales de la zona, oficinas de empresas, escuelas y comercios reducir los riesgos de contagios entre la población. Desde Córdoba una empresa solicitó presupuesto para varios de estos robots, contando que aportaría para el desarrollo de esta tecnología con insumos de gama industrial. Tanto los estudiantes como el profesor Ríos fueron galardonados por la comuna de Campo Quijano por el logro, quedando a disposición de la institución para los aportes que ayuden a seguir buscando el bien de la comunidad.