Concierto

La salteña Carolina Velarde fue invitada especial de Chris Martin de Coldplay

Fan de Coldplay, viajó a Buenos Aires para asistir a uno de los shows que la banda británica brinda en el Monumental. Lo que nunca imaginó fue vivir una de las historias más importantes de su vida.

La calidez de Chris Martin, vocalista de Coldplay con su público es reconocida en el mundo entero. Pero esta vez, la varita mágica de su magnética personalidad tocó a una salteña. Se trata de Carolina Velarde, una joven vecina del barrio Vicente Solá, quien viajó hasta Buenos Aires para asistir a uno de los históricos shows que la banda británica de pop y rock alternativo brinda en el Estadio Monumental. En total son diez los recitales, en el marco de la gira mundial Music of the Spheres world tour.

"Salí el lunes pasado hacia Buenos Aires. El viaje se retrasó porque tomé un colectivo que venía desde La Quiaca y los controles fueron muchísimos. Fueron 28 horas de viaje, pero valieron la pena. Yo tenía entrada para el show del miércoles 26. Fue muy emocionante. Estuve ese día en el campo general. Ya había visto a la banda en 2017, cuando tocó en La Plata. La sigo desde hace muchos años", recordó la salteña en diálogo con El Tribuno.

Hasta allí la historia se teje de manera normal, como la de una fan disfrutando del espectáculo de su ídolo musical, pero aún pasaría mucha agua debajo del puente.

De acuerdo a los planes, Carolina debía volver a Salta el 27, pero su hermana menor tampoco quería perderse la histórica visita de la banda y consiguió una entrada para el día siguiente, viernes 28. "Había que quedarse unos días más. No podía fallarle a mi hermana. El problema era que teníamos que buscar un lugar dónde dormir. Buenos Aires estaba y está aún repleta. La banda atrajo a miles y miles fans no solo de toda la Argentina, sino también de países vecinos que quisieron estar presentes", contó.

"Me pasé gran parte del jueves buscando un hostal o un lugar donde hospedarnos. Con mi mochila a cuestas caminé por todos lados y no conseguí nada. Para tomarme un respiro visité la galería Pacífico, donde me quedé un par de horas recorriendo. De última, pense pasar la noche en Aeroparque, por lo menos allí era seguro", apuntó la salteña.

Luego, Carolina se dirigió al Hotel Faena, para conocer y también para curiosear, ya que había escuchado que posiblemente la banda se hospedaría allí, pero no estaba segura. De todos modos, no tenía mucho más para hacer. En inmediaciones del lugar conoció a dos chicas, fans de Chris Martin y con ellas charló sobre el artista, la banda y los shows.

Ellas, a diferencia de la salteña, no habían podido asistir a los recitales porque no habían conseguido entradas y en reventa estaban por la nubes. "Se notaba la tensión en el lugar, la gente que merodeaba por el Fanea era como que esperaba que el milagro ocurra y ver, aunque sea de lejos, a sus ídolos", relató la joven.

Pasó el tiempo y Carolina, junto a sus nuevas amigas dicidieron salir a caminar rumbo al Puente de la Mujer, que siempre había querido conocer. "Cruzamos una avenida, vimos una chica cantando covers en una esquina. Seguíamos rumbo al puente cuando vimos por la vereda a un joven alto, rubio, de gorra y de remera caminaba en dirección a nosotras. Estaba acompañado por una mujer y un hombre", recordó.

No hubiera pasado de ser una escena normal, común y corriente, si el protagonista no hubiese sido el mismísimo Chris Martin. Las chicas quedaron estupefactas. "Iba sin guardaespaldas, como cualquier persona paseando por ahí, con su remera blanca con una leyenda que decía "love is the drug". Nos acercamos. Rápidamente una de las chicas que estaba conmigo escribió un cartelito en inglés pidiéndole sacarnos una foto. Y el accedió muy amablemente. Fue así que nos retratamos con él", puntualizó la fan salteña.


Invitadas especiales

La cosa no quedó allí, una de las chicas que acompañaba a Carolina cumplía años y se lo hicieron saber a Chris. "Con el poco inglés que hablo, le conté que era el cumpleaños de una de las chicas y que ellas no iban a poder ir al recital porque no habían conseguido entradas. Yo le dije que había venido desde muy lejos, que había viajado muchas horas para verlo. ´Ok´, dijo, y le pidió a una de las personas que lo acompañaba que anotara nuestros nombres y un e-mail, que nos invitaba a asistir al concierto", recordó emocionada. El artista británico les sonrió, las saludó y subió a una camioneta que había llegado a buscarlo.

"No podíamos creer. Nos abrazamos y lloramos. Pero Coldplay es así. Son talentosos, únicos y sencillos. Una de las chicas me invitó a quedarme en su casa. Al otro día nos llegó el mail. Teníamos que retirar las entradas en el estadio Obras Sanitarias. Nos las entregaron allí. No se trataba de tickets comunes. Eran invitaciones especiales para platea preferencial. Son invitadas de Chris, nos dijeron", explicó Carolina.

La noche fue mágica. No podía ser de otra manera. Sin planearlo y sin siquiera soñarlo, la fan salteña vio dos veces en una semana a su grupo favorito, abrazó a Chris Martin y fue su invitada especial. Una experiencia que la acompañará por siempre.

Más de Salta