Algarrobo, el superalimento que combate la anemia, fortalece los huesos y mejora el sistema inmunológico
Las propiedades medicinales del algarrobo, hacen de este árbol una fuente de diversos beneficios para la salud
Un estudio a cargo de científicos del Centro de Edafología y Biología Aplicada del Segura, dependiente del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CEBAS-CSIC), ha devuelto a la algarroba, el fruto del algarrobo, a la actualidad. Durante décadas ha sido relegada a un papel casi testimonial en alimentación, a pesar de que su consumo ha sido muy popular en periodos de carestía, como el acontecido durante la Guerra Civil Española o la posguerra.
Pero el trabajo de investigación a cargo de los expertos del CEBAS-CSIC, publicado en AIMS Agriculture and Food, vuelve a ubicarla en el mapa como un superalimento repleto de propiedades beneficiosas para el organismo cambiando la consideración que de ella se tenía, un tanto infravalorada en los últimos tiempos.
¿Qué convierte a la algarroba en un superalimento? La clave de todo está en el D-pinitol, un componente muy valioso de las vainas de algarroba, que ha despertado el interés de la comunidad científica por sus propiedades farmacológicas y su enorme potencial. No en vano, estas son algunas de sus virtudes:
1. El Instituto Nacional del Cáncer norteamericano (NCI) ha resaltado que la algarroba es uno de los alimentos que ha demostrado prevenir los cánceres de mama y de próstata.
2. El D-pinitol es un principio activo de la planta antidiabética Bougainvillea spectabilis, tradicionalmente conocida por sus efectos similares a la insulina.
3. El D-pinitol procedente de la algarroba ayuda a combatir el estrés oxidativo gracias a su potencial antioxidante.
4. Tiene un efecto hepatoprotector gracias al efecto protector que ejerce sobre los tejidos hepático, renal y pancreático
5. La capacidad inmunomoduladora del D-pinitol, investigada a fondo para tratar patologías como el asma, la inflamación crónica, la artritis reumatoide o la esclerosis múltiple, ha demostrado ser una estrategia prometedora para lograr un sistema inmunitario más equilibrado.
6. El D-pinitol de la algarroba es uno de los pocos compuestos que se sabe que son capaces de imitar la restricción dietética (DR), la reducción continua de nutrientes sin malnutrición, que ha demostrado ser una estrategia efectiva contra el envejecimiento.