Una selección para todos los gustos. ¡No se olviden de pedir salsita picante!.
La empanada salteña es de gran renombre, tanto dentro como fuera de la provincia, y en esta nota, dejamos nuestros lugares preferidos.
Tanto turistas como salteños disfrutan del simple momento de sentarse a comer unas empanadas acompañadas de buen vino o cerveza. Esta pequeña delicia se distingue en general por su tamaño relativamente pequeño, y aunque su receta puede variar, suelen llevar carne cortada a cuchillo, papa hervida, cebolla común o de verdeo, morrón, ají molido y pimentón, todo reogado en grasa de pella. También exsisten exquisitas variedades de queso y pollo, entre otras, aunque la más tradicional es la de carne.
Realizamos una pequeña selección de lugares para comer excelentes empanadas al horno y fritas, más turísticos y locales, una selección para todos los gustos. Los locales quedan en el centro, macrocentro y alrededores de la capital salteña.
El Buen Gusto: Ubicado en el macrocentro de la capital salteña, El Buen Gusto ofrece unas empanadas de tamaño pequeño, livianas y exquisitas. El exterior del local no dice mucho, y su interior menos, pero no se deje engañar por la pinta del lugar: las empanadas de carne son una delicia.
La Criollita: Este restorán, con aires de bodegón, es un clásico salteño y presenta una amplia gama de empanadas, aunque nosotros lo elegimos principalmente por las increíbles empanadas de queso. Además de empanadas, se puede comer locro, guaschalocro, tamales, humitas y otras comidas tradicionales de la provincia.
Roque García: En empanadas las más pedidas son las clásicas de carne o queso, cocidas al horno de barro y servidas con esa salsa de tomate rallado y ají locoto de origen boliviano que aquí se arraigó como costumbre. También son conocidos por las especialidades árabes y por las exquisiteces gourmet, como los champignones a la parmesana gratinados.
El Bodegón: Ubicado en San Lorenzo, a 9 kilómetros de la capital, este restorán tiene una amplia oferta de productos de bodegón: vinos, bebidas espirituosas, cervezas locales e importadas, fiambres de altísima calidad, milanesas, sándwiches y empanadas, entre otros. Recomendamos especialmente las empanadas de carne, eso sí, ¡son una bomba!
Doña Salta: Cerca de la plaza 9 de Julio se encuentra esta vieja casona salteña, sitio emblemático para comer unas soberbias empanadas y pasar un buen rato. Tiene un patio imperdible y una ambientación fantástica.Este restorán ofrece también una amplia gama de comidas, todas de alta calidad y destacadas por su simpleza. ¡No dejen de pedir turrón salteño de postre!
El Patio de la Empanada: Este lugar es bien local, si bien tiene su folclore en el turismo. Las famosas empanaderas del canal, las de toda la vida, las que ganaban el Concurso de la Empanada, las podés encontrar en este singular patio. Recomendamos probar las empanadas fritas, que es donde más se destaca el gusto, y son las más jugosas. Son tapa arterias y bomba, pero deliciosas. Nuevamente, se trata de un lugar que no se destaca por su apariencia, pero si por la calidad de sus productos.
El Churqui: El resto-bar se encuentra ubicado en Vaqueros, y no dice mucho por su aspecto, pero sí por sus empanadas exquisitas y comida en general.Los fines de semana estalla, gracias a la calidad de sus productos regionales. Lo que importa, es lo de adentro.
Marcelo Empanadas: Las fritas son las más solicitadas, empanadas de tamaño considerable, con productos de los valles calchaquíes de gran calidad, con más de 20 años en el rubro. Se encuentran en la zona este del centro salteño a unos 10 minutos en automóvil.
