Salteña cobró el bono de 10 mil, compró una freidora y ahora le cocina a otras mamás

Con el insumo de cocina industrial se puso un emprendimiento de comidas con el que puede multiplicar el beneficio del Estado

Con el insumo de cocina industrial se puso un emprendimiento de comidas con el que puede multiplicar el beneficio del Estado


Es un verdadero ejemplo de solidaridad y sentido de comunidad. Se trata de la protagonista de una historia que se hizo viral. Se llama Rita Pérez y es una joven mamá que vive en Pichanal. Como otras salteñas, cobró el Ingreso Familiar de Emergencia y, lejos de malgastar el dinero, lo invirtió en una freidora y ahora le cocina a mujeres sin recursos. 


 Con el insumo de cocina industrial se puso un emprendimiento de comidas con el que puede multiplicar el beneficio del Estado. Hace entregas a domicilio de diferentes opciones gastronómicas, desde su lugar en calle Formosa del barrio Justo Juez.

“Ella me dijo, ‘mamá cobre los $10.000 y quiero comprarme una carlitera y una papuchera’, le pregunté si estaba segura de querer hacer comida en la cuarentena y me dijo ‘si mamá lo voy a hacer con delivery'”, contó la madre de la joven.

“Somos una familia que tiene la suerte de poder tener un plato de comidas todos los días y un techo seguro, quiero cocinar también para dos madres que tengan una situación difícil en esta pandemia”, dijo la heroína de la conmovedora historia a su mamá, según contó la mujer en La Diez Orán.


“Ella tuvo un hijo con síndrome de Down. Él tiene un cromosoma de más, el cromosoma del amor y nos enseña eso todos los días. Yo creo que por eso mi hija quiere dar amor a otras madres y yo la voy a apoyar en todo”, remarcó.



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