Salta es la primera ciudad argentina en incorporar pagos con celular al transporte público
La empresa SAETA que administra los 600 colectivos de la ciudad se alió con un banco para sumar la opción de pagar el boleto por QR.
La empresa SAETA que administra los 600 colectivos de la ciudad se alió con un banco para sumar la opción de pagar el boleto por QR.
Salta se transformó en la primera ciudad argentina en sumar la opción de pagar el boleto de transporte público desde el celular. A través de la aplicación gratuita de un banco privado la empresa SAETA, que administra los colectivos de la Ciudad, incorporó un sistema de pagos por QR que no necesitan conexión de Internet ni a través de wi-fi ni de datos móviles, de manera tal de permitir que todos los celulares inteligentes sean aptos.
El sistema, que es resultado de seis meses de desarrollo, utiliza la aplicación bancaria para generar una tarjeta virtual de Sociedad Anónima de Transporte Automotor SA ?SAETA. La misma crea un código QR que es leído por las terminales ubicadas en los colectivos. De esa manera, la inversa a la de la mayoría de las billeteras digitales, puede compartir con el sistema la información sobre el viajero y su saldo en la tarjeta sin necesidad de que el celular esté conectado a red alguna. Como medida de seguridad, además, el sistema permite que el código QR sea variable, de manera tal que no pueda ser copiado o falsificado.
?Es un producto pensado no desde Buenos Aires sino desde Salta con los usuarios finales aportando en los detalles. Con foco en la experiencia del usuario, algo que hace que pueda incorporarse sin necesidad de demasiado aprendizaje?, dijo Brian Anthony, gerente de Bancas Comerciales de Banco Macro.
?Es un producto pensado no desde Buenos Aires sino desde Salta con los usuarios finales aportando en los detalles? (Anthony)
La entidad agente financiero de la provincia de Salta, con lo cual la aplicación del banco necesaria para emplear el sistema ya es utilizada por una cantidad importante de los empleados públicos del distrito. Además, para quienes no son clientes, Macro permite abrir una caja de ahorro gratuita en el banco que habilita a usar la aplicación sin costo alguno, a distancia y desde el celular.
?Fuimos por una tecnología que abarque a todos los celulares, por ejemplo NFC no lo tienen todos. No necesita conexión a Internet ni a datos móviles?, dijo Alejandra Rodríguez, gerenta Transformación Digital de Banco Macro.
En la capital de la provincia, más de 500.000 personas utilizan las más de 600 unidades que circulan a diario por calles y avenidas salteñas. Para hacerlo necesitan la tarjeta SAETA, cuyo saldo se ingresa en puntos de recarga de toda la ciudad. La aplicación del Macro ahora permite incorporar una tarjeta virtual de esa empresa para moverse al sistema móvil.
En funcionamiento desde el jueves 28 de octubre pasado, el sistema ya está siendo utilizado por unas 8.300 personas según estimaron en la entidad financiera.
Para incentivar la incorporación de nuevos usuarios, el sistema otorga $320 de saldo gratuito a cada nuevo pasajero que adopta. Es el equivalente a 10 viajes gratuitos. Entre otras funcionalidades, el sistema permite que distintos tenedores de la tarjeta virtual puedan prestarse saldo mutuamente y además otorga un saldo de emergencia equivalente a dos viajes para quienes se quedan sin fondos en el sistema.
?Fuimos por una tecnología que abarque a todos los celulares, por ejemplo NFC no lo tienen todos. No necesita conexión a Internet ni a datos móviles? (Rodríguez)
Banco Macro, creador de la solución, cobra una comisión por recarga que según explican en la entidad no es el foco de la iniciativa. ?No está pensado tanto desde el punto de vista de los ingresos sino desde el punto de vista de la digitalización de los clientes que todavía recurren a operaciones físicas. La incorporación a la banca digital es el principal beneficio para nosotros?, explicó Anthony.
Aunque la solución en sí está diseñada a medida para adaptarse al sistema de SAETA, los creadores confían en que con modificaciones se puede trasladar a otros puntos del país.
